I. Tiempo en que tu vara reverdece
«Y aconteció que el día siguiente vino Moisés al tabernáculo del testimonio; y he aquí que la vara de Aarón de la casa de Leví había reverdecido, y echado flores, y arrojado renuevos, y producido almendras.» Números 17:8
Mes de reverdecimiento, todo lo que estaba eco, lo que otros habían dado por marchito comienza a reverdecer, así como la vara de Aaron reverdeció así reverdecerá tu vida. Otros han tratado de ocupar tu lugar de opacar tu llamado sacerdotal, tu ministerio, la unción que Dios ha depositado en ti producto de tu búsqueda.
Pero Dios te dice hoy la unción que he depositado en ti nadie la puede opacar, nadie la puede esconder, nadie la puede extinguir.
Así como la vara produjo flores, renuevo y frutos así tu vida comenzará a florecer, experimentarás crecimiento, progreso, prosperidad cual nunca antes la has visto.
Hay proyectos, sueños, ideas que dejaste marchitar que pensaste que nunca producirían nada, pero así dice El Señor: «Yo vengo trayendo vida sobre todo lo seco, sobre lo que el enemigo arranco, podo y corto.»
II. Tiempo de derrota de tus enemigos
20 En esta situación, el rey Ezequías y el profeta Isaías, hijo de Amós, oraron y pidieron ayuda al cielo. 21 Entonces el Señor envió un ángel que exterminó a todos los soldados, capitanes y comandantes del campamento del rey de Asiria, quien tuvo que volverse a su país lleno de vergüenza. Y cuando entró en el templo de su dios, allí mismo lo asesinaron sus propios hijos. 22 De este modo, el Señor libró a Ezequías y a los habitantes de Jerusalén del poder de Senaquerib, rey de Asiria, y del poder de todos los demás, y les concedió paz con todos sus vecinos. 2 Crónicas 32:20-22
Así como el enemigo se levanto contra Ezequías, que se paro sobre los muros de Jerusalén para infundir temor, así tus adversarios se han levantado y han proclamado edictos de muerte, de enfermedad, de escasez, de limitación y llanto sobre ti, pero Así te dice El Señor:
«Me levanto en contra de tus enemigo, en contra de tus adversarios, los públicos y los ocultos, me levanto en contra de sus maquinaciones, de sus planes, sus mentiras, sus amenazas, estoy sentenciado en favor tuyo, de tu casa, de tu familia.»
El Señor se esta levantando sobre ti con cánticos de liberación, llena tu casa de alabanza, de jubilo, de adoración, proclama que Jesús es El Señor.
Verás a tus enemigos derrotados, los verás caer estrepitosamente, no quedarán en pie, porque su maldad ha llegado al limite, he visto su opresión sobre ti, sobre los tuyos, sobre mis pequeños, escucha oh manada pequeña, así dice tu Creador:
«Lanzaron brujería, conjuros, hechicería, convocaron muertos y pensaron que te harían caer, que te destruirían, pensaron que te habían destruido, que habían terminado con tu casa, pero lo único que lograron fue que te hicieras más dependiente de mi presencia, que te llenarás más de mi, y por eso he dictado sentencia en contra de ellos, de los suyos, de los que participaron y el mal que lanzaron contra ti se vuelve sobre sus casas.»
III. Tiempo de conexiones divinas
He aquí, llamarás a gente que no conociste, y gentes que no te conocieron correrán a ti, por causa de Jehová tu Dios, y del Santo de Israel que te ha honrado. Isaías 55:5
Prepárate porque en los aeropuertos te cruazarás con personas que serán clave para tu vida, que agregarán valor a tu familia y a tus proyectos, estarás tomando café cuando alguien aparecerá para conversar, estoy promoviéndote a otro nivel, por ello haz las cosas con amor, con una sonrisa en tu rostro y diligencia.
Esta atento al cambio de agenda en tu vida, a los eventos que el Señor esta provocando, porque traerán alegrías a tu corazón, las conexiones traerán recursos para tu ministerio, para que puedas dedicarte a servirle al Señor.
Gente que no conoces pondrá cheques en tus manos para tu sostenimiento, para tu ministerio para que realices la obra para la cual Dios te ha llamado.
Tus negocios comenzarán a crecer producto de las relaciones que El Señor trae sobre ti.
IV. Tiempo de afirmación ministerial
No me escogieron ustedes a mí, sino que yo los escogí a ustedes y los comisioné para que vayan y den fruto, un fruto que perdure. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre. Juan 15:16
Tú tienes un llamado ministerial, un llamado que no es de hombres si no del cielo, y por años has luchado contra ese llamado.
Has sido descartado por otros pero has sido aprobado por Dios, tu tiempo de florecer en tu llamado ha comenzado. Yo te llame, yo te escogí, yo puse ese deseo en tu corazón, dice El Señor.
Verás como personas comienzan a seguirte, a dejar que les ministres que intercedas por ellos, las calles de tu ciudad y país se llenarán de mi gloria por causa de tu llamado y obediencia. Las señales que Jesús anuncio comenzarán a seguirte